miércoles, 18 de noviembre de 2009

Prensa

Hoy quisera hablar algo sobre la prensa en general.

Normalmente se acusa a la prensa de tendenciosa. Nada más cerca de la realidad: todo el mundo quiere arrimar el ascua a su sardina, desde el medio más poderoso al más humilde, desde el poderoso medio de comunicación (por ejemplo PRISA, REcoletos, Planeta, el grupo Murdoch) al más humilde (por ejemplo periódicos locales, digitales, la hoja parroquial o un blog, incluído este) Generalmente nadie cuenta nada por el placer de contarlo (bueno, yo si, porque no creo que me lea nadie) y cuando hay dinero por enmedio, menos.

Esto no es nada nuevo en la prensa. En el Antiguo Egipto Ramsés contaba a su estilo sus batallas (como Kadesh) en los medios de comunicación de entonces: las paredes de los templos. Ramsés también llevaba consigo un escriba para dejar constancia de todo. Podría ser el primer periodista y, por supuesto, no era demasiado imparcial. Dándo un salto en el tiempo, Augusto encarga a Virgilio la Eneida, epopeya sobre el héroe de la Guerra de Troya Eneas, que llega a Roma. Descendientes suyos son, entre otros, Rómulo y Remo, Julio César y ¡oh sorpresa! el propio Augusto, sobrino-nieto de César. Los historiadores de la época (por ejemplo Suetonio y la vida de los Césares) cuenta la historia de estos bastante influenciado por las simpatías que tuviera por cada uno. Dándo otro salto, Joseph Pulitzer (el de los premios) se hincha a vender periódicos demostrando claramente cómo los españoles hunden el Maine en La Habana. Curiosamente, sus premios son ahora sinónimo de excelencia periodística. Es como si se sacara el premio Adolf Hitler a la concordia de los pueblos o el premio Stalin a la libre iniciativa empresarial.

Como podemos ver, la tendencia en la prensa y literatura no es nada nuevo y, salvo breves periodos de tiempo en que los medios tienden ligeramente a la imparcialidad, lo normal es lo contario: la influencia de presiones políticas, económicas, raciales o simplemente, prejuicios deforman la visión de la realidad que reflejan. Incluso se pueden hacer obras de arte a pesar de todo. Películas como el Acorazado Potemkin, Casablanca son obras de arte de séptimo arte. La misma Eneida, antes mencionada, también lo es.

Hay otro aspecto de la prensa que también falla: el contraste de la información. Y esto les pasa desde los más poderosos a los más humildes. Parece que se si alguien tarda media hora en dar una información ya no sirve y así nos van: dan informaciones sin contrastar, erróneas, contradictorias y a veces, les toman sencillamente el pelo (sólo hay que pensar en las bromas del Follonero)

Todo esto es para comentar una cosa: teniendo en cuenta que todos lo medios manipulan en mayor o menor media (ya lo tengo asumido) hay medios que directamente te toman por tonto, a tenor de las informaciones que publican (y aquí cada cual que elija el medio que prefiera) Eso si, los seguidores de los medios más radicales son los que consideran al resto sectarios.

Como punto y final, voy a dejar una serie de máximas de un señor que creo que no era muy buena persona, pero en su trabajo lo bordaba. Son las máximas de la propaganda de Josep Goebbels:
  1. Principio de simplificación y del enemigo único. Adoptar una única idea, un único Símbolo; Individualizar al adversario en un único enemigo.
  2. Principio del método de contagio. Reunir diversos adversarios en una sola categoría o individuo; Los adversarios han de constituirse en suma individualizada.
  3. Principio de la transposición. Cargar sobre el adversario los propios errores o defectos, respondiendo el ataque con el ataque. “Si no puedes negar las malas noticias, inventa otras que las distraigan”.
  4. Principio de la exageración y desfiguración. Convertir cualquier anécdota, por pequeña que sea, en amenaza grave.
  5. Principio de la vulgarización. “Toda propaganda debe ser popular, adaptando su nivel al menos inteligente de los individuos a los que va dirigida. Cuanto más grande sea la masa a convencer, más pequeño ha de ser el esfuerzo mental a realizar. La capacidad receptiva de las masas es limitada y su comprensión escasa; además, tienen gran facilidad para olvidar”.
  6. Principio de orquestación. “La propaganda debe limitarse a un número pequeño de ideas y repetirlas incansablemente, presentadas una y otra vez desde diferentes perspectivas pero siempre convergiendo sobre el mismo concepto. Sin fisuras ni dudas”. De aquí viene también la famosa frase: “Si una mentira se repite suficientemente, acaba por convertirse en verdad”.
  7. Principio de renovación. Hay que emitir constantemente informaciones y argumentos nuevos a un ritmo tal que cuando el adversario responda el público esté ya interesado en otra cosa. Las respuestas del adversario nunca han de poder contrarrestar el nivel creciente de acusaciones.
  8. Principio de la verosimilitud. Construir argumentos a partir de fuentes diversas, a través de los llamados globos sondas o de informaciones fragmentarias.
  9. Principio de la silenciación. Acallar sobre las cuestiones sobre las que no se tienen argumentos y disimular las noticias que favorecen el adversario, también contraprogramando con la ayuda de medios de comunicación afines.
  10. Principio de la transfusión. Por regla general la propaganda opera siempre a partir de un sustrato preexistente, ya sea una mitología nacional o un complejo de odios y prejuicios tradicionales; se trata de difundir argumentos que puedan arraigar en actitudes primitivas.
  11. Principio de la unanimidad. Llegar a convencer a mucha gente que se piensa “como todo el mundo”, creando impresión de unanimidad.
Más o menos todos los siguen en alguna medida, aunque hay medios que las clavan, especialmente el punto 5.

sábado, 14 de noviembre de 2009

martes, 10 de noviembre de 2009

Impresionado por Google Streev View

Que Google se estaba conviertiendo en el Gran Hermano (el de Orwell, no de el de la Milá) es algo que creo que a todos nos rondeaba por la cabeza. Pero el despliegue que ha hecho estos días con Google Street View en España, es algo completamente impresionante.

Anteriormete esta aplicación de Google se podía utilizar en buena parte de las ciudades de Madrid y Barcelona (perdón si me dejo alguna otra) pero ahora ha pasado a una gran parte del territorio nacional, pueblos relativamente pequeños incluidos.

Dejo una imagen (a ver si sale) del monumento al Echador de Sidra, en la Plaza de Requejo, en mi pueblo.


Ver mapa más grande

martes, 3 de noviembre de 2009

Tengo ganas de un e-book reader (y II)

Aquí estoy de nuevo.

Lo cierto es que no pensaba enrollarme tanto, con lo que al final he tenido que partir esto en dos entradas. Voy a seguir viendo las características que ahora tienen los readers para al final, extraer una conclusión personal.

Táctil o no.
En principio la respuesta parace fácil. En plena época del iPhone, los teléfonos móviles táctiles (por cierto, he pillado uno hace una semana, muy recomendable, aunque muy guarro, quedan marcas de dedos por todas partes) el Microft Surface y dispositivos táctiles hasta en la sopa parece que si algo no es táctil hoy en día en un atraso pero ¿queremos para algo in libro táctil? La humanidad lleva escribiendo y/o imprimiendo libros al menos desde los tiempos de los egipcios (los sumerios escribían en tablillas de arcilla, no las voy a considerar libros) y no recuerdo yo que fueran táctiles. Bueno, mi hija tiene un par de stencils, pero creo que no es lo mismo.

A priori, no veo imprescindible que un reader sea táctil ... escepto para una cosa: hacer marcas, dibujos a mano alzada, anotaciones, subrayados. Y para eso puede ser muy útil, como se ve en este video. Un lector de libros y una especie de PDA por el mismo precio. Puede ser interesante.

Conexiones

Esto es sencillo, cuantas más tenga mejor, pero ojo, a ver si se conecta más de la cuenta. En el caso del lector de amazon, este se coencta por medio de una red 3G (como los móviles) para ir a la cuenta de Amazon para poder adquirir libros. Hasta aquí todo correcto. Lo que ya no me gusta fue cuando Amazon borró una serie de libros a sus clientes en sus lectores por un problema de derechos de la propia Amazon. Los usuarios pusieron el grito en el cielo, especialmente los que habían hecho anotaciones en el libro (el lector de Amazon no es táctil, pero lleva un teclado que permite hacer anotaciones)

Es decir, conexiones, bien, pero ojo, a ver quien controla esas conexiones. Yo no pienso adquirir ningún terminal remoto ligado a una tienda en concreto.

Formatos soportados.

Este es otro de los caballos de batalla. Curiosamente, no se leen todos los formatos en todos los lectores. Además de los formatos propietarios de cada vendedor es deseable poder leer al menos PDF, RTF, Word, los del Staroffice, .txt, .html, En este enlace se puede encontrar una comparativa entre varios readers.

Lo cierto es que no acabo de entender, cuando el tema de los formatos es una cosa de software, por qué no se leen más formatos. El Kindle de Amazon es especialmente escaso de formatos.


Almacenamiento

Por lo que he leido, vienen de serie de 100 a 500 Mb. Un libro solo texto puede ocupar 4-5 Mb como mucho, un PDF gordo puede venir con 100 MB, con lo que un almacenamiento externo es deseable por el momento. Por supuesto, compatible con los stándares comunes y más baratos del mercado como el SDHC (una tarjeta baratita de 8 Gb puede andar por 20 euros)

Ecologia

Pues si. También algo de ecología hay. En estos momentos, mientras escribo, detrás de mi hay una estandería de 2.5 metros de ancho por 2,35 metros de alto con más de 500 libros en papel. No quiero calcular su peso (mas bién no puedo) pero seguro que pasa de los 200 Kg en papel (madera aparte) y eso es mucha celulosa, CO2 y energía. En mi disco duro, a lo largo de los años, he recopilado 16 GB de libros en PDF, que hacen unos 4.000, que se pueden almacenar dentro una tarjeta SDHC de 16 Gb del tamaño aproximado de un sello de correos grueso.


Precio

El precio de estos dispositivos varía mucho, desde los 200 y poco a los más de 600 €. Claro que si los comparamos con los +20 € de media de los libros de hoy en día, con 10 o 20 libros, puede estar amortizado. No obstante es un dinero.
Por otro lado, está el coste de los libros electrónicos. A mi el precio de Amazon me parece abusivo. Cuestan el 50 de los libros normales (me gustaría sabes que % del precio de un libro es la impresión y distribución) aunque hay ofertas interesantes. Por otro lado, si alguien pone en google las palabras que de libros igual se encuentra con una sorpresa.

Conclusiones

Si has aguantado este rollo hasta aquí es que estás interesado en saber que conclusiones saco yo. Pues bien, mis conclusiones son las siguientes:
- Estamos en los primeros pasos de una tecnología emergente. Los readers que existen ahora mismo serán poca cosa en comparación con los que habrá en un futuro no muy lejano (comparemos un iPhone con un móvil de gama alta de hace cuatro años)
- La tecnología de tinta líquida parece excelente para la lectura, pero creo que va a evolucionar tanto en resolución como en prestaciones. Creo que todos los readers serán táctiles en poco tiempo (en torno a un año) Lo normal son 4 o 16 tonos de gris, pero creo que no tardaremos mucho en  tener 16, 32, 256 o más. Ya veremos que pasa con el color.
- La compatiblidad y número de formatos a preproducir brilla por su ausencia. Me recuerda los tiempos de los primeros DVD, cuando me gasté 60.000 pts de las de entonces en un aparato que sólo reproducía DVD (muy bien, eso si) pero luego llegaron los VCD, los CVCD, .avi, .... etc. Al final, tengo un disco duro multimedia que lee lo que haga falta y he regalado el DVD antiguo. Aunque sólo es ir moejorando el firmware, los fabricantes son reaciones ya que así venden aparatos con más prestaciones.
- El almacenamiento todavía es ridículo, lo que da una idea de lo primitivos que son todavía los aparatos (mo viejo móvil tenía 8 Gb de almacenamiento, el actual, 32 Gb, es una cosa completamente superada)
- El coste, aunque asequible, es todavía elevado.
- La industria todavía no ha dicho demasiado en cosas de DRM y similares y lo va a decir antes o después.

Conclusiones

Creo que la tecnología todavía está un poco verde, con un amplísimo recorrido por delante. Los aparatos disponibles ahora mismo son limitados, especialemente en función de lo que van  a ser de aquí a dos años. No creo que, salvo casos de extrema necesidad (por tener que llevar muchos papeles encima o similares) que estas navidades sean el momento adecuado para adquirir uno. Si no hay prisa yo recomendaría esperar a primeros de 2011 (o finales de 2010 como pronto) a ver como está el panorama. El precio debería bajar al menos un 30% si siguen mas o menos las tendencias de la electrónica.

No es cuestión de esperar durante años al lector definitivo, pero si de tomarse una prudencial espera con el fin de no gastar el dinero en algo que queramos cambiar al cabo de un año.

Saludos

lunes, 2 de noviembre de 2009

Tengo ganas de un e-book reader (I)

El otro día estuve viendo un comentario al respecto de uno de ellos y me entraron ganas de tener uno.

Lo primero de todo es informarse un poco de lo hay en el mercado, con lo que me fui a Google, puse e-book reader y me puse a leer. Leo varios comentarios de entusiastas del invento (¡vaya! igual no es una mala idea) pero poco a poco voy aprendiendo cosas que creo son importantes:

- Tamaño y peso.
- Tamaño y resolución de la pantalla..
- Tinta electrónica.
- Tácti.
- Conexiones.
- Formatos soportados.
- Capacitad
- Ecología
- Coste

Vamos a ir por partes:
Tamaño y peso.
Si queremos que sea cómodo no debería ser mucho mayor que un libro normal. Ahora mismo, el libro que estoy leyendo mide 24x16x4 cm. No se su peso porque no tengo una báscula de precisión suficiente, pero es un libro pesado (cuando lo meto en la mochila con el portátil se nota) Las dimensiones de los ebook mayores andan por ahí, con la ventaja de no ser un solo libro. Un punto a favor del reader.
Tamaño y resolución de la pantalla.
Este es uno de los puntos que más me preocupan. Las pantallas de los reader normales suelen andar por cinco o seis pulgadas en los normales y hasta diez en los mas caros. Ahora mismo tengo una pantalla de veinte en el ordenador y no me importaría que fuera mas grande ... pero ¿estamos hablando de lo mismo? Pues no, porque no hemos tenido en cuenta un segundo factor: la resolución.

La resolución es el número de puntos que hay en cada pulgada (me paso al sistema anglosajón por que es el usado para pantallas) En mi monitor de 20" con 1680x1050 puntos (formato 16:10) en cada pulgada horizontal o vertical hay entre 97 y 99 puntos (si Pitágoras o la Excel no se han equivocado en los cálculos) mientras que en el más humilde lector, con 5" y 800x600 puntos la cifra sube hasta nada menos que 200 puntos por pulgada (en el de 6" se queda en unos 166 ppp, que tampoco está nada mal) Sin dedicarme a la impresión, he leido que la impresión de libros se hace a unos 150 ppm, con lo que vamos sobrados.

Pasemos ahora al aspecto del tamaño. En el libro anterior que he estado comentando, un libro amplio, con letra muy cómoda (yo la leo sin problemas poniendo el libro a un metro de distancia) empiezo a medir:
- Diagonal de la página: 11"
- Diagonal del texto (sin márgenes) 8,2"

En el reader no es necesario mantener márgenes, con lo que no hacen falta pantallas tan grandes. Si mido 5 pulgadas en mi libro veo que caben perfectamente 12 líneas de texto de las 36 que tiene cada página (no parece demasiado problema pasar más veces de página) manteniendo el tamaño de fuente (reduciendo un pelín, cabrían mas líneas)

Pero ya he dicho que es un libro grande. Voy a pasarme a una versión de bolsillo del Criptonomicón, de Stephen. Este libro ya es mucho más pequeño (17x11x2,5 cm) También tiene 36 líneas por página y se lee bastante bien (he leído libros de bolsillos con letra mucho peor) La página tiene 8" y el texto 6,5"

Para resumir y si tenemos en cuenta que podemos cambiar el tipo de letra, es como leer un libro de bolsillo con un número de páginas acorde a nuestra comodidad (podemos "engordarlo" o "adelgazarlo" según pongamos la letra mayor o menor)

Tinta electrónica

Este es el punto fuerte de los readers. No son pantallas como las conocemos sino un dispositivo que cambia de estado en función de unos pulsos eléctricos ... y así se queda hasta que llegue el siguiente pulso. Nuestras pantallas (desde los CRT a los TFT) refrescan la imagen una serie de veces por segundo (entre 60 y 200) y eso, al cabo de un tiempo, acaba cansando al ojo físico.Lo mejor de todo es que solo gastan energía cuando hacen el cambio, quedando sin consumo cuando están monstrando algo (al revés que los monitores convencioales) Tampoco precisan retroiluminación y se pueden leer a pleno sol.

¿Tiene estos dispositivos limitaciones? Pues si, pero no son excesivamente relevantes para un lector aunque si lo serían para una monitor por ejemplo. Veamos algunas de ellas:
- Refresco lento. Tardan sobre medio segundo en pintar una nueva pantalla (un monitor TFT puede hacer en 2 ms) Esto es imperdonable para una pantalla, pero asumible para un libro (nunca he cronometrado lo que tardo en pasar una página, pero debe andar por un segundo o dos)
- No tienen color. Pero tampoco vamos a ver fotografías sino a leer, aunque la cosa podría ser interesante para tomar notas, resaltar, subrayar, ..... A cambio tienen entre 4 y 16 escalas de grises. Son pocas y yo creo que esto va a evolucionar y mucho en el futuro.

Para saber más sobre la tinta, se puede recurrir a la Wiki.

Armaduras.

He de reconocer que últimamente no me estiro demasiado en el tema bloguero este. Tampoco voy a molestarme en hacer propósito de enmienda so...